Después de una larga ausencia… Regreso con ganas y pisando fuerte.
Está receta es muy sencilla y la puedes hacer con todo tipo de ingredientes o como yo les suelo llamar con gabardinas (restos), y la verdad, es que puede salirte un plato muy rico, sin darte cuenta.
Hoy es un día que no has previsto nada y tienes poco tiempo, estás llegando del trabajo y necesitas soluciones, dispones de 1 hora antes de que aterrice tu invitado, y no solo tienes que cocinar… Tienes que ordenar y ponerle un poco de ganas.
Si ya tienes la masa de la pasta hecha, entonces mejor que me expliques a mí como la haces. 🙂
En caso contrario, lo suyo es comprar la pasta hecha, ya sea fresca o bien de bolsa.
Los ingredientes necesarios para está receta, son muy sencillos.
En una tabla de cortar de joseph&josep cortas una cebolla (bien cortadita) con los cuchillos de zwilling junto con un ajito machacado, 3 cucharas de aceite de oliva y lo pones en una sartén alta de de Buyer y lo dejas a fuego lento… hasta que este dorado, después le añades la carne picada (solo ternera, unos 250 grm.), una vez hecha, la salsa de tomate y dejas que se vaya haciendo a fuego lento. Chup, Chup!
Después yo le pongo una cucharadita de azúcar y un poco de crema de leche para suavizar la salsa.
Y ya por último si tienes unas espinacas y quieres acabarlas, le puedes añadir junto con un poco de albahaca, pimienta y sal.
La preparación de la pasta es sencilla, en una cacerola de le creuset de 24 cm. la llenas de agua y le pones un chorrito de aceite y cueces la pasta.
Una vez colada, puedes mezclar la pasta junto con la salsa y ya por último espolvoreas con el rallador de microplane un poco de queso parmesano y estará listo para comer.
Buono apetito!